´Europa podría ser un freno a las expectativas de Unidas Podemos en el gobierno´

“Un pacto PSOE y PP es lo mejor para España, pero soy consciente de que es muy complicado que salga, con los líderes y con los partidos actuales”, afirma el columnista del periódico El Mundo.

Tenemos lo que parece un principio de acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos. ¿Es un suicidio político para Pedro Sánchez o, al menos, para el PSOE? ¿O puede dormir tranquilo el presidente?

El presidente del Gobierno siempre va a dormir tranquilo porque le da igual decir una cosa que la contraria. Hemos visto todas las ruedas de prensa y comparecencias en las que decía todo lo contrario de lo que firmó otras veces. Sí es cierto que en el PSOE hay una parte del partido que no ve el acuerdo con buenos ojos y habrá que ver si al final el independentismo lo apoya o no. Rodríguez Ibarra dijo que si el partido pactaba con Podemos, él se iba… Habrá que esperar a ver el programa de gobierno una vez que se constituya –si se constituye–, porque hay muchos temas del programa electoral de Unidas Podemos que no se pueden poner en práctica, entre otras cosas por Europa, que pide unos presupuestos moderados que el programa de Podemos no contempla. La idea de Podemos va por otro lado de lo que pide Europa, por el incremento del gasto social, por proponer más gasto público, y eso sufragarlo con una subida de impuestos. Así que por Europa puede venir un freno. En todo caso, habrá que esperar si efectivamente se forma un gobierno y en qué condiciones.

Existe otra alternativa que es la unión de los partidos constitucionalistas. Pero hay una derecha que no considera legítima a la izquierda y una izquierda que tampoco considera legítima a aquella. En el fondo Sánchez y Casado son hijos de esta mentalidad. ¿Habrá algún día un pacto PSOE/PP?

Más que considerarse legítimos o no, aquí no se contempla la gran coalición como en Alemania por razones más pragmáticas. Porque cada uno mira su caladero electoral y consideran que aliarse con el “enemigo” diluye su discurso, por ambas partes, tanto en la derecha como en la izquierda. Además, el PSOE tiene un partido más a su izquierda, y el PP ahora también tiene un partido potente a su derecha, algo que nunca había ocurrido y ninguno de los dos puede ceder terreno. Y cada uno tiene su propia visión sobre cómo liderar el país. Es una propuesta que hemos hecho desde nuestro periódico porque creemos que es lo mejor para España, pero soy consciente de que es muy complicado que salga, con los líderes actuales y con los partidos actuales.

La noche del 10-N el líder de Vox, Santiago Abascal, hablaba de que habían conseguido un cambio político y cultural. ¿Es así o el voto a Vox es algo coyuntural dada la emergencia de la situación en Cataluña?

Está claro que la exhumación de Franco o lo que ha pasado en Cataluña tras la sentencia del procés han terminado dando votos a Vox, pero me parece difícil que vuelva a repetir un resultado como este, de 52 escaños. Se ha dado en un momento muy propicio para ese partido. Si Cataluña sigue así, claro que podrán mantenerse, pero no si cambian las circunstancias. PP y Vox son vasos comunicantes. Una de las razones por las que el PP no ha llegado a los cien escaños que se pronosticaban en los días previos a las elecciones ha sido la subida de Vox, que nadie esperaba que fuera tan fuerte. Que haya gente que, ante lo de Cataluña, ante lo de Franco… decida irse un poco más a la derecha tiene cierta lógica en un tipo de votante. Cuando baje todo este suflé, esos votantes probablemente vuelvan a una opción más moderada.

´Hay formaciones que pretenden comenzar un tiempo nuevo porque son contrarias a la Constitución del 78´

Ahora mismo tenemos un tercio del Congreso formado por una amalgama de partidos independentistas, regionalistas, euroescépticos, antisistema… Esto da que pensar. ¿Está en riesgo el régimen del 78?

Efectivamente, nunca ha habido tal número de partidos pequeños que suponen casi un tercio del hemiciclo, con mucha fragmentación y además, casi ese tercio, por unas razones u otras, son contrarios a la Constitución.

Posiblemente en un sentido destructivo y no constructivo porque es cierto que no tiene que ser un texto inmutable.

Sí, en el sentido de que la Constitución del 78 ya no vale. Y claro que se puede cambiar, pero hay formaciones que pretenden comenzar un tiempo nuevo. Es una situación nueva que habrá que manejar con cuidado porque es complicada. Sería necesaria una cierta estabilidad en el gobierno pero ¿a expensas de qué gobierno? Esa es la cuestión.

´Cuanto más politicemos la sociedad más entraremos en confrontación´

Comentaba que un pacto PP/PSOE parece que diluye su discurso pero en nuestras relaciones personales cualquiera de nosotros tiene una mujer, un padre, un compañero de trabajo… que votan a un partido que no es el tuyo y nos comunicamos y llegamos a acuerdos.

Sí, pero Cataluña ya no es como lo que comentas y precisamente el ascenso de Vox está haciendo que aumente la polarización, basta ver las redes sociales. Creo que se empieza a no aceptar a un partido político que ha ganado una serie de escaños en unas elecciones. Quizá aún no a nivel de las relaciones de amistad y familiares, pero hay que andar con cuidado que se empieza a moverse algo. Repito que Cataluña es un ejemplo en este sentido.

Si reducimos nuestra identidad a nuestras ideas políticas ¿no estaremos en un bucle continuo de confrontación?

Es verdad que cuanto más politicemos la sociedad más entraremos en confrontación. Nadie pensaba en Cataluña hace quince años la situación que se está dando ahora de familias en las que no se puede hablar de política. Aunque no lo reconozcan los independentistas eso es así. Que pase en el resto de España es más complicado, pero vamos a ver cómo se desarrollan las cosas. Este Congreso está más radicalizado que antes, y es cierto, existe el peligro de que esto pueda llegar a la sociedad civil.

Por tanto, es una corresponsabilidad de la sociedad civil superar esta confrontación. Recientemente hemos visto cómo en tiempos de crisis las familias se han ayudado, cómo los abuelos han sostenido a las familias, cómo las empresas han buscado nuevos horizontes en las exportaciones… la crisis es la oportunidad para que salga lo mejor de cada uno.

Sí, y si no llega a ser por esa solidaridad familiar en España, la recesión habría dejado más heridas. Eso es una reacción ante situaciones muy malas, pero lo ideal es que no se produzca y que cada uno tenga su trabajo digno para poder sacar adelante sus proyectos de vida.