Se acrecienta la soledad
Los nacionalistas vascos, a través de su portavoz en el Congreso, Josu Erkoreka, se han convertido esta semana en una terminal del PP en las críticas a las manipulaciones judiciales amparadas por el Ejecutivo. Es una nueva advertencia a Zapatero para que se olvide del PNV en los próximos cuatro años si Vitoria se queda sin influencia nacionalista. Es ahora cuando se hace más pertinente la reclamación que ha hecho el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, para que el PSE no se venga abajo ante el temporal que le sobreviene desde el partido de Urkullu. Por interés para Euskadi y para los propios socialistas vascos. Y es que es en el País Vasco donde Zapatero puede salvar los únicos trastos aparentemente indemnes que le quedan.
Muy seriamente dañada la economía, al jefe del Ejecutivo se le aviva uno de los frentes, el de los autónomos y pequeños empresarios. Este viernes la principal asociación del colectivo autónomo, ATA, junto a las patronales de pymes catalanas, baleares y canarias, han acordado manifestarse el próximo día 26 en Madrid para exigir al Gobierno medidas para evitar su asfixia financiera. Lo harán frente al Congreso de los Diputados, quizá el mejor lugar para recordarle al presidente del Gobierno que se queda sin apoyos tanto en la calle como en el Parlamento.
Las pymes han llegado al límite, declaraba el presidente de ATA al convocar la movilización. ¿Hasta dónde llegará el de Zapatero? Todo indica que el saneamiento de la política vasca puede ser insuficiente para aliviar su maltrecha posición.