Violación de derechos civiles
Los personeros de las ONG más representativas precisaron que entre 2008 y 2009 se produjeron 2.893 manifestaciones pacíficas, que la Constitución establece el derecho de los ciudadanos a manifestar pacíficamente y sin armas, no obstante lo cual se ha dictado una ley que penaliza las manifestaciones aun cuando sean pacíficas. Denunciaron igualmente el uso de armas de fuego y sustancias tóxicas contra manifestantes, lo que expresamente prohíbe la Constitución, y que en varias ocasiones el presidente Chávez ha felicitado a la policía y a la guardia nacional cuando reprimen o disuelven cualquier expresión de disidencia.
En el curso del presente año las ONG registraron 165 ataques contra periodistas y medios de comunicación. "2009 es el año de más violencia contra la prensa". Advierten que el futuro inmediato es poco alentador, en razón de que Chávez en sus arengas hace referencia a las próximas elecciones y llama a enfrentar "la conspiración mediática" de la oligarquía pitiyanqui que intenta desestabilizar su gobierno. Las víctimas más frecuentes de las agresiones son los reporteros de televisión. Las amenazas a la vida y a la integridad personal abarcan el 46% de los casos registrados, con saldo de tres periodistas muertos. La mayoría de los casos registrados permanecen impunes, la Fiscalía tiene instaurados juicios contra 14 medios o periodistas acusándolos de dañar la reputación de funcionarios públicos. La Sala Constitucional decidió que en materia de derechos humanos privan las leyes nacionales sobre los tratados internacionales suscritos por la República.
La asamblea general de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), celebrada en Buenos Aires, conoció y dio respaldo al informe presentado por David Natera, presidente del Bloque de Prensa Venezolano (BPV), en el cual se denuncia que Chávez prosigue en su proyecto de consolidar la hegemonía comunicacional del gobierno, al punto que actualmente tiene a su disposición 731 medios: 238 emisoras de radio, 28 televisoras, 340 diarios, semanarios y revistas, y 125 páginas web, aparte de las cadenas de radio y televisión, todo ello dedicado a la propaganda ideológica.
"Venezuela vive una permanente confrontación entre la realidad del país y lo que Chávez intenta imponer como verdad". Natera denunció también la "eliminación progresiva" de los medios independientes y puso como ejemplo la salida del aire de 34 emisoras radiales, las amenazas que pesan sobre 29 más y sobre la televisora Globovisión. Alertó sobre la propuesta de una ley de justicia popular con jurisdicción penal, civil, militar y de menores, que asigna a los consejos comunales competencia para intervenir en los procesos y sancionar jueces. La SIP se mostró preocupada por el surgimiento en el continente de medidas y leyes contra la libertad de expresión, inspiradas en el ejemplo venezolano. El Instituto Internacional de Prensa (IPI), con sede en Viena, que agrupa más de 100 países, decidió enviar una misión investigadora, pues le "preocupa muy seriamente" la situación de la libertad de prensa. El director del IPI dijo que la misión se propone advertir al Gobierno que la legislación lesiva a la libertad de expresión que ha dictado contradice los estándares internacionales.