Lo que cuenta es el hacer, no el ser

España · Lola Martínez
Me gusta 30
16 enero 2020
Sánchez ofreció su primera rueda de prensa como presidente del Gobierno el martes. Le preguntaron por la que va a ser la nueva fiscal general del Estado, Dolores Delgado. Y Sánchez dio un triple salto mortal para justificar su elección. Evitó dar explicaciones de por qué ha propuesto a alguien como fiscal general del Estado que ha sido diputada del PSOE y ministra hasta ayer. Acabó asegurando que el PP y las asociaciones de fiscales critican el nombramiento porque bloquean todo, bloquean la justicia. La oposición critica su decisión porque no reconoce el resultado electoral.

Sánchez ofreció su primera rueda de prensa como presidente del Gobierno el martes. Le preguntaron por la que va a ser la nueva fiscal general del Estado, Dolores Delgado. Y Sánchez dio un triple salto mortal para justificar su elección. Evitó dar explicaciones de por qué ha propuesto a alguien como fiscal general del Estado que ha sido diputada del PSOE y ministra hasta ayer. Acabó asegurando que el PP y las asociaciones de fiscales critican el nombramiento porque bloquean todo, bloquean la justicia. La oposición critica su decisión porque no reconoce el resultado electoral.

El presidente del Gobierno equiparó la crítica a una de sus primeras decisiones con un cuestionamiento de su legitimidad. Reconocer su legitimidad como presidente del Gobierno no significa considerar bueno todo lo que hace. El ser y el hacer son dos cosas distintas en democracia. De hecho, la democracia se basa en la distinción entre los dos planos. Porque se le reconoce como legítimo presidente de un Gobierno democrático y no como monarca absoluto, se critica lo que ha hecho. Sánchez confunde la legitimidad de “su persona” –como le gusta decir– como presidente del Gobierno, legitimidad que solo cuestiona Vox, con que aceptemos todo lo que hace, aunque quiebre claramente la independencia de las instituciones.

Cuando la política se traslada al ámbito de la identidad se crea una fractura insalvable. La política es el ámbito de la gestión, de lo contingente. La identidad como negro, como blanco, como progresista, como liberal o como presidente del Gobierno, perfectamente legítima, ni es cuestionada ni da un plus de valor a las decisiones que se toman. Quien acepta entrar en un debate de legitimidad y de identidades hace la misma política de Sánchez, que es una política de fracturas insalvables. El que ha sido elegido por el Congreso como presidente tiene toda la legitimidad, es decir toda la bendita vulnerabilidad de un sistema democrático, para ser valorado, juzgado y votado por lo que hace, no por lo que es.

Noticias relacionadas

Estados de ánimo
España · Javier Folgado | 0
El Congreso del PSOE y la suspensión de la negociación de los presupuestos autonómicos por parte de Vox han marcado la agenda política en los últimos días. La auto victimización no nos permite ver el bosque en sus diferentes tonalidades y hace sentir todo lo extraño como potencial enemigo. ...
9 diciembre 2024 | Me gusta 2
No se meta usted en política
España · Luis Ruíz del Árbol | 0
La dicotomía entre lo político (ineficaz, caro, esencialmente corrupto) y lo técnico (eficiente, económico, transparente) es el nuevo caballo de Troya que una parte de las élites globales está usando para debilitar la credibilidad y la confianza en las instituciones, y facilitar así su asalto...
3 diciembre 2024 | Me gusta 3
La mirada del fango
España · Ángel Alarcón | 0
En "Cartas al director", un lector escribe sobre su experiencia como voluntario en las tareas de reconstrucción tras la DANA en Valencia....
2 diciembre 2024 | Me gusta 1