Frente al terremoto de Chile
Ante el terremoto que ha afectado a nuestro país, se hace aún más evidente que la vida es misteriosa y no nos pertenece. Frente a la belleza de la naturaleza chilena brota siempre una pregunta: "¿Quién es su autor?".
De la misma manera, delante de la magnitud de este terremoto, nos sentimos pequeños, impotentes y frágiles. Sin embargo, de esta experiencia surge otra pregunta: "¿Qué es lo que nos pide el Señor a través de esta circunstancia?".
Después de haber visto, recientemente también, en nuestra compañía y en muchos testigos, el rostro transfigurado de Cristo que se nos da a conocer, somos ayudados a entrar en el Misterio de la Cruz. Sin Cristo, la belleza sería fuente de una triste melancolía y el drama se volvería tragedia, como nos ha recordado Julián Carrón frente al terremoto de Haití.
Por eso estamos invitados a rezar por todos los que sufren las consecuencias de este drama y también tenemos el deber de dejar que la caridad que hemos recibido desborde en una atención solidaria a las necesidades del pueblo chileno.