Renzi afronta su año más difícil

España · PaginasDigital
COMPARTIR ARTÍCULO Compartir artículo
| Me gusta 1.908
3 septiembre 2015
Aunque su imagen sea la de un líder consolidado, Matteo Renzi sabe que se encuentra ante su año más difícil como Primer Ministro, ya que debe hacer todo lo posible por aguantar su puesto hasta que la nueva ley electoral entre en vigor y así poder concurrir a unas nuevas elecciones generales como líder del Partido Democrático (PD). Y es que Renzi tiene un importante problema en el orden legislativo: se ha quedado sin una mayoría efectiva de gobierno tras dinamitar el Pacto del Nazareno y reagruparse el sector crítico de su partido, que se ha unido para evitar que Renzi consiga sacar adelante la supresión del Senado como segunda cámara parlamentaria (debemos recordar que al convertirla en Cámara de las Regiones ya no sería clave en la aprobación de las leyes).

Y es que Renzi se encuentra ante un problema clásico de la política italiana: a ojos de los parlamentarios, y también de una parte de la población italiana, está durando demasiado, por increíble que pueda parecer, ya que el Gobierno actual tiene solo un año y medio de vida. En efecto, dentro de tres días Renzi habrá superado a Emilio Colombo como Primer Ministro, con más de 560 días al frente del Consejo de Ministros, y ya sólo quedarán por delante de él mitos de la política italiana como Alcide de Gasperi, Giulio Andreotti y, aunque en su caso deba ser muy matizado, Silvio Berlusconi, además de políticos con mucho peso como Aldo Moro, Romano Prodi, Amintori Fanfani, Bettino Craxi o Giuliano Amato. Y todo ello con el añadido de que, a diferencia de la mayoría de los citados anteriormente, nunca ha ganado unas elecciones generales, lo que deja su legitimidad siempre en entredicho. Seguramente ahora mismo las ganaría, pero ya sabe que Sergio Mattarella, como Presidente de la República, hará todo lo posible por aguantar la legislatura, que es a fin de cuentas uno de los principales mandatos del Jefe del Estado, principal garante de la estabilidad política.

El principal problema para Renzi es, como para tantos otros primeros ministros que le han antecedido, sacar adelante las leyes en el Senado. Y más aún cuando ese Senado tiene que votar su propia autodisolución. Debe recordarse que dentro de esta cámara hay mucho ´viejo dinosaurio´ de la política italiana que, en un contexto de crisis como la que vive actualmente Italia, no está dispuesto a perder sus privilegios cuando aún restan dos años y medio de legislatura. Y Renzi, que no eligió ni a sus diputados ni a sus senadores (lo único que realmente controla con mano firme es su partido político porque es su Secretario General desde hace casi dos años), lo sabe muy bien. Sin embargo, debe seguir haciendo cosas para ganar votos entre los italianos, que en este momento sólo le otorgan un 35% de apoyo. Entonces, ¿cómo hacerlo?

Básicamente, Renzi sólo puede hacer dos cosas: sacar adelante leyes que sean del gusto de la izquierda de su partido, y seguir recortando el gasto público (lo que le haría chocar con esa misma izquierda del partido). Y, además, esperar a que las inversiones sigan llegando. El Primer Ministro italiano ha conseguido invertir la tendencia de crecimiento y ahora mismo Italia podría llegar al aumento de un punto del PIB en el conjunto del año 2015, pero eso sigue siendo una cifra muy pobre: necesita estar entre el 2 y el 3%, como mínimo. Mientras eso no se produzca, será objeto de ataques por parte de aquellos que le niegan su apoyo, y, en ese sentido, ante la inexistencia de rivales fuera de su partido, el enemigo se encuentra en casa.

Por eso este año es tan importante para el futuro político de Matteo Renzi: tan pronto puede acabar cayendo por falta de apoyos parlamentarios como puede lograr un resultado histórico en unas elecciones generales que le catapulten como el líder del futuro. El problema es que le aguardan nuevas elecciones (de carácter regional) donde da la impresión de que el Movimiento Cinco Estrellas puede vivir un ascenso fuerte, ante el hecho de que Renzi está descuidando, y mucho, el flanco izquierdo. Por ello, estaremos atentos ante el futuro devenir de la política italiana. 

Noticias relacionadas

Hasta aquí llegó el agua
España · Luis Ruíz del Árbol
Me llamó la atención en muchas calles del Barrio del Carmen una serie de pequeñas placas cerámicas con la frase “Hasta aquí llegó el agua en la riada de 1957”, que indicaban con una línea el nivel del agua que, en ese concreto punto, había llegado a alcanzar la gran riada de ese año....
4 noviembre 2024 | Me gusta 1