Tendrá su oportunidad

A 61 kilómetros al sur de Valencia queda afincada la ciudad de Játiva, oficialmente Xativa. Allí, representa a la ciudad desde 1932 el Olimpic de Xativa, su equipo de fútbol. Encuadrado en el grupo III de 2ªB, siete temporadas en esa categoría y cuarenta en tercera eran hasta el viernes su mejor carta de presentación. El viernes la historia cambió. “Una vez empatamos con el Madrid”,dijo el míster del club valenciano al finalizar el choque copero frente al conjunto merengue.
Una web no oficial del club nos ayuda a entender mejor el contexto en el que estamos. Un club no profesional con futbolistas que comparten la afición de jugar al fútbol con su puesto de trabajo. Ya conocimos en su día el caso Mirandés. Yo mismo este año he visto al Conquense, cuyas características son las mismas.
El campo municipal La Murta es el típico estadio español de 2ªB. Césped artificial y una tribuna principal junto a una mini grada en un fondo y otra pequeña en la zona de general.
El fútbol provinciano sabe distinto y se disfruta tanto de él como el de élite. Bien lo sabemos aquellos que procedemos de lugares lejanos a las grandes capitales.
Toda la ciudad se vistió de domingo. Incluso al estadio se le colocaron gradas supletorias para poder acoger a 6000 espectadores.
Exhibición de fuegos artificiales previo al partido. Era una fiesta recibir al Madrid. Éste fue acogido con aquello en lo que los valencianos destacan.
¡Qué bello es el fútbol! Nunca me cansaré de decirlo: cuando el árbitro pita todo puede suceder. Allí dentro ya no existen las hipótesis. El pequeño vuelve a encontrarse con la oportunidad de comerse al grande. Aunque a muchos nos cabree el actual formato copero, yo no puedo dudar de que en un inicio, en la fase de dieciseisavos por lo menos, la copa está hecha de otra pasta. Pensar en eliminatorias a partido único me esboza una gran sonrisa.
El Madrid, de azul el pasado viernes, dejó a Isco el criterio y la magia para tratar de reventar la eliminatoria en 90 minutos como ya hicieron Atlético y Barcelona. No fue posible. Enfrente, un equipo bien armado que aguantó y miró de cara al mejor equipo del siglo XX. Y donde no llegaban los zagueros, estaba Francis guardameta blanco que lo paró todo.
Cercano queda el día en que el Olimpic saboree definitivamente la gloria. Esa hora llegará cuando pisen por primera vez el Santiago Bernabéu. Mirar desde abajo a aquella enorme estructura que huele a fútbol por todas partes. ¿Quién sabe si es posible hacer un gol allí para poner entre las cuerdas a los de Ancelotti?
Preparen las cámaras de fotos, abran bien los ojos. Pase lo que pase, el fútbol valenciano tendrá una nueva fecha que guardar en su memoria.