Quiero ser francés, pero no republicano

Mundo · Fernando de Haro
Me gusta 907
17 noviembre 2015
En este momento todos somos franceses, todos queremos –menos mal- estar cerca de un pueblo que ha sufrido el terrible golpe del terrorismo. El blanco, el azul y el rojo son nuestros colores. Notre Dame y la Torre Eiffel nuestros símbolos. La sangre vertida es nuestra sangre.

En este momento todos somos franceses, todos queremos –menos mal- estar cerca de un pueblo que ha sufrido el terrible golpe del terrorismo. El blanco, el azul y el rojo son nuestros colores. Notre Dame y la Torre Eiffel nuestros símbolos. La sangre vertida es nuestra sangre.

Pero otra cosa es diferente es que queramos ser todos republicanos franceses. La culpa de lo sucedido es solo de los terroristas. Pero el modelo que la república francesa ha utilizado para hacer frente a los problemas que están en el origen del yihadismo y el modo en el que está haciendo la guerra no son una buena referencia.

Francia ha desarrollado un modelo de integración que no ha funcionado. Es un modelo que ofrece como referencia para la vida en común los valores forzosamente laicos de la república. Al final solo queda el individualismo y la soledad. Se han privatizado forzosamente las propuestas de sentido y las experiencias religiosas. De este modo, los jóvenes que viven en las periferias, que buscan un significado, no encuentran más que abstracciones y una cultura del consumo. Francia, como toda Europa, parece sin fuerzas para hacer una propuesta que sea alternativa a la ideología vviolenta. La única respuesta ha sido lo que algunos denominan “una sagrada nada”, valores cívicos que se han quedado huecos, sin un sujeto que los mantenga en pie. La cruz, la media luna y la estrella de David no pueden ser exhibidas en público de forma ostentosa. La igualdad, la fraternidad y la libertad no tienen rostro.

Lo ha explicado con claridad el sociólogo Wieviorka: hay dos procesos que han contribuido a elaborar la radicalización islamista en Francia y en otras partes, sobre todo Bélgica. “Uno -sostiene el sociólogo- se refiere al fracaso de la integración de los hijos de inmigrantes que han vivido el paro, la exclusión social, la crisis de las banlieues, el racismo y que, sin haber hallado un ámbito en la modernidad occidental, le profesan un odio inextinguible”. “El otro proceso atañe a la búsqueda de sentido –añade Wieviorka-. Puede concernir a jóvenes procedentes de sectores integrados de la sociedad deseosos de dar un sentido a su existencia, en desacuerdo total con la cultura del consumo. La falta o la pérdida de sentido en las sociedades europeas, pero también musulmanas -Túnez, por ejemplo- son asumidas de forma fanática por el islamismo radical de grupos terroristas (Al Qaeda) y del proto-Estado que es el Estado Islámico”.

Y luego está el modo de hacer la guerra. Lo ha dicho claro Sarkozy: el Gobierno de Hollande ha errado en su manera de combatir al Daesh. En lugar de sumarse a los esfuerzos ya en marcha ha preferido actuar por su cuenta. Se ha negado además a contar con el apoyo de Bashar Al Ashad, el líder del actual régimen sirio. Es una condición de realismo, sin el que la guerra no se puede ganar. No estaría mal tampoco que Francia revisara su política de venta de armas en Oriente Próximo.

Noticias relacionadas

Irán: una guerra difícil de ganar
Mundo · Claudio Fontana | 0
Los iraníes son conscientes de los riesgos que conlleva una respuesta masiva contra Israel y sus aliados pero estos días se ha golpeado el corazón estratégico de Irán por lo que los cálculos de la República Islámica podrían ser muy diferentes....
17 junio 2025 | Me gusta 1
Ucrania: “Además de territorios, debemos hablar de derechos humanos”
Mundo · La Nuova Europa | 0
El 12 de mayo se celebró el webinar Ucrania, el martirio de un pueblo, organizado por Alleanza Cattolica, en el que participaron Svjatoslav Ševčuk (arzobispo mayor de Kiev-Halyč), Matteo Matzuzzi (Il Foglio), Adriano Dell’Asta (Russia Cristiana), Laura Boccenti (Alleanza Cattolica) y Marco...
16 junio 2025 | Me gusta 1
A 80 años de la victoria, ¿qué se celebra?
Mundo · Adriano dell'Asta | 0
Hace ochenta años terminaba la Segunda Guerra Mundial en Europa. Seis terribles años de horror: 60 millones de muertos, 156 millones de mutilados. Y al final, la victoria sobre el nazifascismo. Pero en la Rusia actual se celebra un mito sin connotaciones históricas ni memoria auténtica, donde...
12 junio 2025 | Me gusta 2
La guerra no es la suspensión de la ética
Mundo · Antonio R. Rubio Plo | 0
El filósofo David Cerdá seleccionó, tradujo y prologó el libro "Guerra. Ensayos estadounidenses" (Ed. Rialp). Es una colección de ensayos breves escritos durante el siglo XIX y la primera mitad del siglo XX....
5 junio 2025 | Me gusta 0