Protagonistas y obras
Un importante periódico económico describía así a los empresarios: "Exploradores solitarios en un ambiente cada vez más complejo, a veces hostil. Movidos por un optimismo de la voluntad…". Pero esta imagen de protagonismo puede llegar a ser una pretensión, pues por sí sola no es capaz de alcanzar ni la satisfacción ni la libertad.
Escribe Luigi Giussani en el texto del que está tomado el título del Meeting: "Ser protagonistas no quiere decir tener la genialidad o la espiritualidad que tienen algunos, sino tener un rostro propio, único e irrepetible en toda la historia y en la eternidad". Es un "rostro único", que tiene el espesor y la profundidad de la relación con el infinito, con el significado de la vida y del mundo. Éste es su valor, que no depende del éxito, pero que ya está en cada uno de nosotros. Así, valorar a una persona significa sobre todo este valor, este rostro único.
La Compañía de las Obras, en el fondo, existe precisamente como servicio recíproco para que, en la circunstancia del trabajo y del hacer empresa, cada uno pueda redescubrir este valor y convertirse en protagonista: de la propia vida, del propio trabajo, de la propia hacienda, del bien común. Valorar, es decir, reconocer lo positivo que ya hay, y ayudarlo, hacerlo crecer. ¿No es acaso ésta una de las principales tareas del empresario en la relación con quienes trabajan con él? ¿Y no es acaso de esta mirada nueva y distinta, capaz de captar en la realidad aspectos inimaginables, de donde nacen los retos empresariales grandes y pequeños, las nuevas empresas, las innovaciones…?
En el Meeting de Rímini tendremos ocasión de escuchar diversos testimonios de empresarios que han demostrado una capacidad creativa, una voluntad de construcción y un apego a la positividad de cada circunstancia, tales que les hacen verdaderos protagonistas sobre todo de su propia vida.
Pero esta disponibilidad para valorar es también tarea del Estado y de las instituciones al margen de la empresa, de las obras de caridad y de cualquier intento que nazca de la libre iniciativa de cada uno. Es lo que llamamos "subsidiariedad". También de esto se hablará en el Meeting, donde tendremos ocasión de dialogar con políticos, empresarios, grandes directores y académicos sobre temas que van del made in Italy al trabajo, del desarrollo sostenible a las infraestructuras, de la relación entre la empresa y la persona en las grandes empresas hasta el tema de la innovación.
El espacio CdO en el Meeting de Rímini albergará, entre otras cosas, una exposición dedicada a Giuseppe Tovini, abogado italiano de la segunda mitad del XVIII y claro ejemplo de un protagonismo verdadero, y por eso capaz de dejar huella en la sociedad de su tiempo y en la futura, gracias a su implicación en la realidad, que le llevó al nacimiento de obras culturales, sociales, económicas y educativas.