Primeros cien días de Capriles

Prometiórespetar a la oposición y cerrar lainfame página de políticos encarcelados con el rótulo de presos políticos.Reiteró que su primera acción de gobierno será designar un gabinete de unidadnacional, sin descartar que funcionarios de laactual administración que hayan actuado como auténticos servidores públicos yno como instrumentos del partido que gobernaba, sean ratificados en sus cargos.En referencia al drama de la inseguridad, expresó que era necesario sacar lapolítica partidista de los cuerpos policiales y depurarlos, para lo cual serequiere castigar y expulsar a los delincuentes que han penetrado dichoscuerpos. Se comprometió a aplicar un plan de desarme y la destrucción masiva dearmas de fuego. Anunció que promovería la formación de 200.000 funcionariospoliciales que reivindiquen la dignidad de tal función y se constituyan engarantes de los derechos humanos.
Para lapuesta en marcha de una nueva política de Desarrollo Urbano y Vivienda, capazde superar los errores del régimen anterior, Capriles plantea un sistemaintegrado de planificación territorial y urbana que unifique los planes de usodel suelo y de transporte, concertado con las autoridades regionales, metropolitanasy municipales. Propone también activar un programa de recuperación, ampliacióny mantenimiento de edificaciones educacionales, médico asistenciales, y otrasedificaciones públicas, para que con ello se contribuya a la generación deempleo en el corto plazo. Su gobierno, según Capriles, eliminará losracionamientos eléctricos, abriendo el sector a la participación privada endistribución, comercialización y prestación de servicios especializados.
Simultáneamentecon la presentación del programa para los primeros 100 días, se realizó unmaratón de promesas presidenciales incumplidas, que se prolongó por espacio de 12 horas, con numerosaasistencia. Fueron desfilando representantes de la Mesa de Unidad Democrática quienesmostraban pancartas con consignas electorales del Psuv y recortes de prensa condeclaraciones de Chávez y altos funcionarios, que ofrecían ofreciendo resolverlos problemas que mayormente afectan a la población. De seguida daban lecturay comentaban lo que propone Capriles enrelación al respectivo asunto. El maratón tuvo acogida en algunos medios, yeventos similares están programados para el interior, con el propósito deestimular el contraste entre la imagen de un gobernante que ha estadorepitiendo durante años las mismas promesas y el joven político insurgente queasume la esperanza nacional de un mejor futuro.