Negociación con las FARC: ¿Quién miente?

Empecemospor hablar de secuestro. Puesto que Santos aseguró, durante los primeros mesesde su mandato, que un inamovible para sacar la llave de la paz era liberar atodos los secuestrados, muchos creímos que lo cumpliría. Pero llegado elmomento clave, se puso del lado de la guerrilla. Dijo con firmeza: "Hayque creerles", cuando la banda terrorista aseguró que no tiene unsecuestrado. Y pidió a las víctimas que aporten pruebas, una bofetada que llenóde ira y tristeza a familiares de cautivos.
Elviernes, los fiscales de Justicia y Paz afirmaron que sólo hay un secuestradoen manos de las FARC. No sé cómo a los fiscales no les da vergüenza proclamartamaña falacia cuando sólo con los reportes que tengo -y carezco de losrecursos investigativos de la Fiscalía-, en este momento, aparte delsecuestrado que dijeron, hay diez personas en manos de las FARC, incluyendocuatro ciudadanos chinos, y sin contar los 36 venezolanos que dijo Capriles ylas decenas de quienes no volvieron a dar razón. Prefiero pensar que nohicieron bien el trabajo antes de creer que lo hacen con intenciones perversas.Por cierto, el ELN tiene 13 secuestrados.
Tambiénsorprende que el Presidente, Piedad Córdoba y las FARC coincidan a la hora deatacar a País Libre y digan que sus informes son falsos y esconden interesesocultos. Hubiera esperado del mandatario un respeto por los que luchan con lasuñas, desde hace 20 años, por un país mejor sin recurrir a las armas y de lamano de las víctimas.
Encuanto a lo de la Ministra, es de Ripley. Si asegura que 'Simón Trinidad' puedeestar en la mesa, verá lo que demoran en pedir presos en Colombia para ir atomar ron a Cuba. Otra estúpida entrega gratuita.
Siel Gobierno se amarrara los pantalones, evitaría, al menos, la rueda de prensaen Oslo. Ya verán el lamentable espectáculo de unas Farc vomitando mentiras almundo. Ojalá el Presidente y los negociadores hubieran acompañado a víctimas delos paramilitares en su largo recorrido por conocer la verdad sobre susfamiliares secuestrados y desaparecidos, como hizo País Libre. Entenderían quenegar las evidencias no reconcilia.