Los cristianos no abandonarán su tierra
Oriente Medio se enfrenta a un peligro existencia, corre el riesgo de ser radicalmente transformado por la ideología de los movimientos Takfiri, de los que el IS es solo un ejemplo entre otros, que están desintegrando naciones y comunidades enteras, difundiendo el caos. Para Habib Afram, presidente de la Liga Siriaca, hace falta que el mundo árabe y musulmán vuelva a poner en el centro del debate político los valores que defienden los derechos humanos y el respeto de cualquier grupo y minoría, garantizando su igualdad política y su ciudadanía.
Entrevistado por el periódico iraquí “Ankawa”, Afram subraya que los cristianos “no hacen otra cosa que difundir estos principios para poder permanecer en su tierra”. El líder de la Liga Siriana destaca que en el mundo todavía son demasiado débiles las voces de quienes denuncian la destrucción de antiguas iglesias cristianas –incluidos importantes lugares de culto de las iglesias siriaca, caldea, armenia y asiria–, la expulsión de las minorías fuera de sus casas, la decapitación de personas inocentes, la quema de libros, la ocupación de las propiedades por parte de los extremistas. “Todo nuestro patrimonio histórico, explica Afram, está desapareciendo y nadie se muestra mínimamente preocupado por estos hechos”. La actual campaña militar guiada por Estados Unidos corre el riesgo de convertirse en inútil si no hay una decidida acción cultural e intelectual, empezando por la educación de los jóvenes.
“Los cristianos nunca abandonarán su tierra –reitera este líder político–, si perdemos Mosul y Nínive podemos quedarnos en Ankawa y Dohuk, si perdemos Raqqa y Al-Hasakah en Siria nos instalaremos en Wadi el-Nasara, si nos obligan a salir del país iremos al Líbano”. Para terminar, Afram señala que por el momento la política de la comunidad internacional está favoreciendo la emigración al exterior de los cristianos, provocando indirectamente una gran ventaja para los terroristas del IS.