`La tensión entre libertad religiosa e identidad es buena` (y II)
Oasis no hemos dejado de documentar ampliamente el impresionante éxodo de fieles cristianos, pero no queremos ceder a la lógica del lamento o del llanto. Los obispos locales han afirmado repetidamente que un cristiano que no tenga conciencia del papel que la Providencia le asigna al hacerle nacer y crecer en un ambiente mayoritariamente musulmán es potencialmente un cristiano que emigra. Nosotros deseamos contribuir a incrementar esta conciencia.
Oasis nació con una "opción preferente" por el islam. Los desafíos actuales de la libertad religiosa, sin embargo, van más allá del mundo islámico. Hay grandes tensiones, por ejemplo, también en China, India… ¿Hay un riesgo en Occidente de que la libertad religiosa se vea exclusivamente como un "problema islámico", empeorando así el llamado "choque de civilizaciones"?
Sin duda, la libertad religiosa, que es un valor fundamental y que no se reduce simplemente a la libertad de culto, debe ser protegida en el todo mundo, no sólo en los países de mayoría musulmana. También es cierto que éste es un problema sin resolver en la relación entre islam y modernidad. Por eso creo que la cuestión se debe plantear de un modo urgente también entre los propios musulmanes.
Usted está muy implicado en el diálogo con el islam. Ha dicho en varias ocasiones que su interés no es tanto el "islam moderado" como el "islam tradicional". ¿Cómo va su intento de construir puentes con el islam tradicional?
Es muy pronto para hacer balances. De cualquier modo, nuestra opción es sobre todo por el islam del pueblo y no es un acuerdo exclusivo respecto a la categoría del "islam moderado". El término "islam del pueblo" nos parece que designa de un modo más preciso a nuestro interlocutor porque los musulmanes moderados tienen la posibilidad de influir, en la medida en que interpretan y tal vez llegan a hacer crecer el sentimiento de los fieles, mientras que la religiosidad que realmente sostiene la vida de las poblaciones se desarrolla en condiciones muy difíciles. Lo puede testimoniar cualquiera que haya visitado Oriente Medio.
Oasis celebra este año su quinto aniversario. ¿Puede hacer un breve balance de este lustro de experiencia: frutos positivos, cosas aprendidas, errores a evitar en el futuro…?
El fruto más bello es el nacimiento gradual de un sujeto comunitario que abraza a los cristianos de Occidente y de Oriente, que tienen relaciones intensas y de diversa naturaleza con los musulmanes. Esperamos que este sujeto crezca cada vez más maduro. Es con esta perspectiva que buscamos la mayor incidencia posible para los instrumentos de Oasis, como la revista semestral en papel, el newsletter mensual, la página web (www.oasiscenter.eu), la colección de libros…
Publicado en All Things Catholic