La crueldad del Isis merece nuestra más enérgica condena
La declaración pública del predicador turco Fethullah Gülen donde condena con firmeza las acciones criminales del llamado Estado islámico.
Como musulmán practicante, profundamente influenciado por los principios de mi fe, condeno con fuerza las atroces brutalidades del grupo terrorista Isis. Sus acciones son una desgracia para la fe que proclaman y constituyen crímenes contra la humanidad. La religión proporciona un fundamento sobre el que establecer la paz, los derechos humanos, las libertades y el gobierno de la ley. Cualquier interpretación contraria, incluso el abuso de la religión para alimentar los conflictos, es sencillamente errónea y engañosa.
El Isis no es el primer grupo que usa la retórica religiosa para enmascarar su propia crueldad. Al Qaeda lo hizo hace 13 años y Boko Haram más recientemente. Lo que les une es la mentalidad totalitaria que niega la dignidad a los seres humanos. Cualquier forma de violencia contra civiles inocentes o persecución de minorías contradice los principios del Corán y la tradición de nuestro profeta (haya para él paz y bendición).
Los miembros del Isis o son completamente ignorantes de la fe que proclaman o sus acciones tratan de servir a los intereses individuales o de sus líderes políticos. Por no considerar que sus acciones son las de un grupo terrorista y como tales deberían ser llevados a juicio y obligados a responder de sus horrendos crímenes.
Envío mis sentidas condolencias a las familias de los caídos en Iraq y Siria, y a las familias de James Foley, Steven Sotloff y David Haines. Que Dios pueda darles fuerza, paciencia, perseverancia, y aliviar su sufrimiento. Rezo también por la liberación inmediata y segura de los rehenes y pido a Dios, el Misericordioso, que nos conduzca a todos hacia el respeto recíproco y hacia la paz. Invito a todos en el mundo entero a unirse a esta mi oración.