`La apelación que hace el manifiesto de CL a lo nuevo me parece fundamental`
¿Qué le ha parecido el manifiesto?
El manifiesto me parece positivo, especialmente por destacar el valor del realismo a la hora de afrontar los problemas económicos, por situar al hombre en el centro de esos problemas y por señalar la existencia de oportunidades en medio de la crisis.
En el texto se asegura que una de las condiciones necesarias para el cambio en esta crisis es el reconocimiento de la realidad como algo positivo. ¿Coincide con esta afirmación?
Conocer la realidad social y económica es esencial para establecer las políticas de salida de la crisis y las actitudes individuales frente a ella. En esa realidad hay elementos externos, influencias que llegan de fuera y que son difíciles de manejar, pero también son relevantes los aspectos internos que están a nuestro alcance y que es necesario remover para volver a mejorar el bienestar de la mayoría de los ciudadanos. El realismo es necesario y también lo es no dejarse llevar por un conservadurismo que impida cambiar las estructuras sociales y las actitudes personales.
Se asegura que la reactivación del crecimiento "nace de ese instante imprevisible en el que un hombre genera algo nuevo -productos, servicios, valor añadido, belleza para sí mismo y para los demás- en su familia, en su comunidad, en su empresa, en su pueblo o ciudad. Una aportación de bien y de riqueza que ningún antecedente histórico, social y político puede explicar del todo". Es un factor que no se suele tener en cuenta, ¿por qué?
La apelación a lo nuevo, a lo que emerge del espíritu humano, de la creatividad, de la imaginación, de la ciencia, del conocimiento me parece esencial. Joseph A. Schumpeter, el gran economista austríaco, ya advirtió en su Teoría del desarrollo económico, publicada en 1911, del papel central de la innovación para impulsar el cambio, el desarrollo y el bienestar. Schumpeter advirtió también que la innovación es la fuerza fundamental que impulsa los ciclos económicos, de manera que su irrupción hace progresar a la economía y su agotamiento la conduce hacia la recesión y la crisis.
La política se considera subsidiaria de la vida social, ¿qué puede aportar en este momento ese enfoque?
La política no lo es todo y, por tanto, no se debe esperar de ella la atención completa a las personas desplazadas con la crisis, a los desempleados, a los peor preparados. Las estructuras sociales, como la familia o las redes de solidaridad, juegan en ello un papel muy relevante. Pero también hay que exigir a la política que, más allá de los intereses partidarios, busque el mejor desempeño para los ciudadanos.