Hacia un nuevo imperio otomano

La OTAN se ha reunido este martes en Bruselas a petición de Ankara para decidir juntos las operaciones militares contra los separatistas kurdos del PKK y el Isis. Durante la víspera se produjo una violenta contraofensiva de los rebeldes kurdos, después de que el ejército turco les atacara desde el pasado viernes.

¿Qué pide Turquía?

Ankara pidió a la OTAN esta reunión de emergencia en virtud del artículo 4, que se limita a invocar “cooperación y coordinación de medidas de seguridad”, y no del artículo 5, que habla de “defensa colectiva”. El problema es que muchos países de la OTAN no son favorables, y el artículo 5 exige unanimidad.

¿Quién se opone a los bombardeos aéreos de la OTAN contra el Isis?

Para empezar, Alemania. Berlín se ha mostrado disponible a la hora de proporcionar armas a los kurdos, pero no ha enviado a sus fuerzas contra el califato.

¿Cuáles son los planes de Estados Unidos?

Los EE.UU luchan contra el Isis con el apoyo de Assad, pero también con el objetivo de sustituirle. Además, están condicionados por la decisión de no emplear tropas terrestres, no asumir responsabilidades más allá de ciertos límites, y ser amigos tanto de Turquía como de Iraq, aunque tengan intereses opuestos entre sí.

¿Y cuál es la estrategia turca?

Turquía quiere luchar al mismo tiempo contra el Isis y contra Assad.

¿No es una contradicción?

Normalmente, el enemigo de tu enemigo es un amigo, pero en Oriente Medio no es así.

¿Es una guerra de todos contra todos?

Prácticamente sí. Turquía forma parte de una coalición anti-Isis, pero en la práctica también apoya al califato como representante de los sunitas contra los chiítas. El Estado Islámico mientras tanto lucha igual contra kurdos y contra chiítas. De modo que el escenario es muy complicado. Ya en 2012 Turquía acogió al ex vicepresidente iraquí, Tareq Al ¬Hascemi, que mantenía relaciones con el Isis y negoció la liberación de los 43 diplomáticos turcos secuestrados en Mosul.

¿Cuáles son las prioridades de Erdogan?

La principal prioridad de Erdogan es constituir una zona que sirva de amortiguador en territorio sirio, que frenaría también la expansión de los kurdos sirios hacia Occidente. Una zona controlada por la propia Turquía, pero también por los kurdos, que por otro lado pueden llegar hasta el Mediterráneo.

¿De qué forma se formaría ese “amortiguador”?

Para crear esa “zona amortiguadora” Turquía intervendría con tropas terrestres, es decir, con un cuerpo de expedición de 20.000 hombres. Estos hombres lucharían contra el Isis, pero al mismo tiempo también contra Assad, pues ocuparían una parte de territorio sirio de unos 100 kilómetros por 30, es decir, 3.000 kilómetros cuadrados. En esta zona, Erdogan concentraría a una parte de los refugiados presentes en Turquía, que ya suman 1.800.000 personas.

¿Cuál sería la respuesta de Assad?

La operación turca provocaría una escalada por parte de Siria, porque Damasco no podría aceptar que los turcos entraran en su territorio.

¿Qué consecuencias tendría esta escalada?

Tanto Assad como el Isis quedarían fuera gracias a la acción de Turquía.

¿Estados Unidos se quedaría mirando?

El gran problema es que los principales aliados de los americanos son kurdos sirios del YPF, que son también aliados del PKK que lucha contra Turquía. De modo que Erdogan no bombardea solo al Isis sino también al PKK que defendió Kobane.

Abatido Assad y desplazado el Isis, ¿quién ocuparía esa zona?

Se produciría una situación al estilo libio, siempre que no se establezca una especie de “Nuevo Imperio otomano” que pusiera las cosas en orden hasta que los pueblos de la zona consiguieran llegar a un acuerdo de solidaridad nacional.