Felipe VI va a encarnar perfectamente la ejemplaridad

El discurso de nuestro nuevo Rey recoge las esperanzas e ilusiones de millones de españoles. Felipe VI encarna el espíritu de una nueva generación de españoles que desean mirar hacia delante, con renovados propósitos de servicio y de convivencia en el respeto a los valores constitucionales. Una bocanada de aire fresco, que entra en la vida pública española, en la que confío será una nueva era de regeneración democrática, de las personas que componemos el conglomerado institucional.
El principal reto de Felipe VI será, tal como lo consiguió su padre, el Rey Juan Carlos, la convivencia pacífica de los españoles. España y los españoles hemos cambiado mucho durante los últimos cuarenta años. La crisis económica, la desafección de la clase política y la globalización son elementos determinantes de nuestro próximo futuro. Yo confío personalmente en el nuevo Rey.
He tenido oportunidad de departir en alguna ocasión con él. Creo que es un hombre íntegro, bien preparado y conocedor de la responsabilidad que hoy asume. La ejemplaridad, valor del que ha dejado referencia en su discurso, es un bien exigible a cualquier servidor público. Seguro que él va a encarnar perfectamente esa ejemplaridad. Mucho esperamos del nuevo Rey. Quizá esa sea una de los obstáculos que tendrá que superar, ya que nuestro ordenamiento jurídico tasa con claridad sus funciones.
En cualquier caso, con su autoridad moral, y el apoyo de instituciones y personas que tenemos responsabilidades en vida política, y especialmente de la mayoría de los españoles, le vamos a ayudar a conseguir