El Movimiento Cinque Stelle se prepara para unas cada vez más cercanas elecciones generales
Preguntado por la razón del éxito de su partido en las últimas elecciones municipales, Di Maio responde que la clave debe buscarse en los errores del Primer Ministro Renzi. Afirmó al respecto: ´Él mismo ha sido el que ha destruido su respaldo político. Durante la campaña, se ha pasado todo el tiempo hablando del referéndum sobre las reformas constitucionales de octubre y no de los problemas reales. (…) en Roma, donde hay barrios que no tienen agua, ha intentado engatusar a los ciudadanos con los Juegos Olímpicos. Es una actitud mezquina. Nosotros hemos hecho lo contrario. Hemos preguntado a los ciudadanos cuáles son sus prioridades y a partir de ahí hemos hecho el programa. Y entre las prioridades no estaban los Juegos, sino el transporte público, la limpieza urbana y la transparencia en la lucha contra la corrupción´.
También se le preguntó si la alcaldía de Roma no podía ser un ´regalo envenenado´ dadas las circunstancias en las que se le entrega la capital del país: una deuda de 14.000 millones de euros, la Mafia infiltrada, los servicios públicos colapsados… Di Maio responde: ´Sé que todo el mundo nos mira. Actuaremos con honestidad ante los ciudadanos y así nos respaldarán incluso en las decisiones más difíciles. Tenga en cuenta que nos han confiado la capital porque todos los otros han fracasado y la han destruido. Ahora tenemos la misión de reconstruir una ciudad en ruinas y ninguno tiene la varita mágica´.
También se le preguntó por los problemas más urgentes de Italia en aquel momento (junio de 2016). Y su respuesta no puede ser más contundente: ´Dos cosas. Tenemos 10 millones de personas bajo el umbral de la pobreza, 11 millones de ciudadanos que han renunciado a curarse por dificultades económicas y, al mismo tiempo, somos el segundo país después de Bulgaria con la percepción más alta de corrupción. Necesitamos, ya, dos instrumentos. Un plan eficaz contra la corrupción y una renta básica para los ciudadanos que estén bajo el umbral de la pobreza. Eso aumentará la demanda interna y salir de la deflación. Tenemos jóvenes que tienen que emigrar, pensionistas con menos de 400 euros. Dedicaremos el dinero que se despilfarra (que él calculaba en un 2% del PIB) para dar 780 euros a quien tiene poco o nada´.
Fue entonces cuando el periodista, por cierto corresponsal de El País en Roma, le preguntó si esa no era una forma de ´caridad institucional´. Di Maio respondió con rapidez: ´No, porque el sistema no funciona cogiendo el dinero y quedándote en el sillón. Según nuestro plan, si coges el dinero y te quedas en el sillón, te arriesgas a seis años de cárcel. El objetivo es ocupar la jornada de quien recibe la ´renta de ciudadanía´ en formación y en trabajos públicos gratuitos. Se tienen que poner a disposición del Estado, que les hará tres propuestas de trabajo. Si renuncian a ellas, pierden el derecho al beneficio. Tenga en cuenta que Italia es uno de los pocos países que no tiene una renta básica y a la vez es uno de los países con más alto número de inactivos en toda Europa, un 35% de personas que ni siquiera busca trabajo. Por tanto, no funciona la teoría de que, si coges la renta, ya no estás incentivado para ir a trabajar. Es exactamente al contrario´.
La última pregunta a la que hubo de contestar el Vicepresidente de la Cámara de Diputados era si su partido no suponía una suerte de ´amenaza para la idea de Europa´. Di Maio lo negó tajantemente con las siguientes palabras: ´En la Europa en la que los conservadores organizan un referéndum para sacar a su país de la Unión Europea, creo que el M5S sea la última de las amenazas para Europa. Tenemos 17 europarlamentarios que cada día intentan cambiar tratados y normativas desde dentro´.