Demagogia fiscal
El gesto de subir los impuestos a las rentas más altas es demagogia fiscal. Según algunas estimaciones se recaudarán alrededor de 200 millones de euros, lo que para las arcas públicas es muy poca cosa. La propia ministra Salgado ha reconocido que se trata de un pequeño ajuste. Desde que en el mes de mayo Zapatero decidiera recortar el sueldo a los funcionarios, congelar las pensiones y emprender una reforma laboral que se ha quedado en poco, hemos gozado de la confianza de los mercados internacionales. Eso le ha permitido al presidente asegurar en Estados Unidos que el problema de nuestra deuda estaba resuelto.
Pero este miércoles hemos tenido que pagar más cara la colocación y los expertos ya avisan de que no nos podemos dormir en los laureles. El Banco Central Europeo le ha dicho al Gobierno que sus previsiones son demasiado optimistas y los analistas señalan que con las medidas tomadas no conseguiremos, ni por asomo, reducir el déficit al tres por ciento en 2013. Zapatero hace demagogia fiscal para contentar a las bases más de izquierda que se sienten animadas a ir a la huelga y vende en Nueva York una disciplina presupuestaria irrealizable.