Buscando nuevas inversiones para Italia
Renzi mostró su convicción pública de que con Macri se iba a abrir en Argentina una nueva etapa que dará ´esperanzas´ a muchas personas tanto de América Latina como de Europa. Quizá lo más llamativo es que hacía nada más y nada menos que dieciocho años que un Primer Ministro italiano no pisaba suelo argentino. Y eso que, como recordó el Primer Ministro italiano, Argentina e Italia ´no son simplemente amigos´, sino ´países hermanos´, invitando a Macri a que visitara su país en los próximos meses. En todo caso, entonó el ´mea culpa´ por la tan prolongada ausencia de los mandatarios italianos en suelo argentino: ´En lo institucional es una locura que nadie haya venido aquí. En consecuencia asumimos el compromiso de venir muy seguido. En marzo va a estar aquí el ministro de Cultura y en junio vamos a organizar una gran reunión con alrededor de 300 empresarios interesados en invertir en Argentina´, adelantó.
Macri dijo por su parte que esperaba que Argentina se convirtiera en ´el supermercado del mundo´ y pidió que el país abriera ´sus puertas´ para que otros italianos pudieran ayudarlos ´a crecer´, como en su momento lo había hecho su abuelo Giorgio, un inmigrante llegado desde Calabria, una de las regiones más pobres de Italia y tradicional foco de emigración. Y añadió: ´Tomamos la visita como una clara muestra de afecto. Ahora tenemos que transformarla en futuro´.
Pasando al terreno de lo concreto, Macri recorrió junto a Renzi el obrador en el que se realiza el soterramiento de un ferrocarril en cuya construcción participan varios países. Desde ese lugar, el Presidente argentino se comprometió a retomar las tantas veces anunciadas obras de soterramiento. Renzi, por cierto, acompañó a Macri porque precisamente una de las empresas que trabajará en el proyecto es la italiana Ghella (el resto de las compañías que conforman la Unidad Transitoria de Empresas (UTE) son las española Iecsa y Comsa, y la brasileña Oderbrecht).
La visita de Renzi se produce justo después de una semana bastante negativa para la economía italiana. Además de que la bolsa perdió una importante cifra de su valor general (lo que sucedió en otras plazas bursátiles europeas), el Primer Ministro italiano tuvo que ver cómo la Banca Etruria, aquella en la que el padre de la ministra María Elena Boschi (Pier Luigi Boschi) es Vicepresidente, era declarada insolvente.
Eso sí, Renzi no abandona en ningún momento su recurso a las maniobras de distracción, con continuas críticas a la Unión Europea. Sin ir más lejos, esta misma semana pasada dijo: ´La UE es como la orquesta del Titanic´ (es decir, que tocaba el violón mientras se hundía). O esta otra perla: ´Italia ha estado en deuda con las instituciones europeas durante años, pero ahora las cosas han cambiado y tras tres años de recesión hemos hecho reformas y los fundamentos de la economía son positivos de nuevo. Por tanto, podemos volver a nuestro trabajo, y nuestro trabajo es liderar Europa, no ir a un edificio de Bruselas a recibir órdenes´. Veremos si el tiempo le da razón, pero Renzi, como siempre, fiel a su estilo provocador.