Barroso asegura que Europa se construye con realidades como el Meeting de Rimini

Los ponentes han destacado su preocupación por recuperar la confianza de los ciudadanos en la Unión Europea, pues según los últimos sondeos realizados en los 27 estados miembros, está por debajo del 50%. Barroso ha destacado la labor de los padres fundadores, Adenauer, Schuman y De Gasperi, y el hecho de que después de la Segunda Guerra Mundial no optaran por la lógica de la desconfianza sino que "dieron crédito a su corazón y rompieron con valor el cerco del odio y la violencia".
Mario Mauro ha valorado el trabajo de Barroso y ha subrayado la necesidad de que los estados y regiones europeas respeten las normas de la Unión para garantizar su futuro. "Muchas naciones se dedican a destruir de noche la tela que Barroso teje de día". Una afirmación con la que Formigoni se ha mostrado de acuerdo. El presidente lombardo ha señalado la importancia de que las naciones europeas respeten el principio de subsidiariedad, que "aparece en la carta fundacional de la Unión pero que está siendo sometido a interpretaciones reducidas". Formigoni ha defendido la necesidad de crear cuanto antes un observatorio europeo de la subsidiariedad bajo la guía directa de Barroso y con representación de los estados y las regiones.
El presidente de la Comisión ha señalado que Europa no es sólo un proyecto de "convivencia pacífica, sino mucho más amplio, e implica construir sobre la subsidiariedad, la solidaridad, la libertad y la democracia". En su opinión, "la crisis económica y de valores a la que se enfrenta Europa no se resolverá sólo con el Estado y el mercado. Es necesaria la creatividad y la libre iniciativa de la gente, algo quel a Unión deberá valorar y favorecer".
Barroso ha sido muy explícito al señalar la responsabilidad del mundo financiero en la crisis. "Es hora de que los mercados financieros paguen su parte en el coste de la crisis. Los ciudadanos ya han dado lo suyo, contribuyendo al rescate de numerosos bancos".
Respecto a las regiones, para Barroso son indispensables para el crecimiento futuro de una Europa sostenible, que luche contra la pobreza y la marginación social. "Europa no puede venir impuesta desde arriba, debe ser reforzada por cada uno de vosotros. Vosotros aquí, en el Meeting de Rímini, podéis ayudar a construir una Europa más fuerte, que defienda sus valores en el escenario mundial y que constituya una oportunidad para todos".