Apostar por la vida
Nuestros políticos en su día fueron votados para que negocien por el bien de los ciudadanos, buscando formas "siempre" favorables para todos.
Como dice el señor Parro, los poderes públicos han de velar por el derecho a decidir "ser madre" y adoptar "todas las medidas necesarias que garanticen en este supuesto el derecho a la vida".
Eso es apostar por la vida. Desde estas líneas y la oportunidad que me da este periódico quiero animar a todos los alcaldes de España a hacer lo mismo, porque todo Estado de Derecho tiene el deber de proteger la vida humana contra cualquier agresor injusto, aunque se trate de sus padres. Es el primer deber de Estado que se precie.
Muchas gracias a estas personas que han dado un paso valiente, como decía Pablo VI, "no puede haber verdadera paz si no se defiende y promueve la vida".