Agua para elefantes

Este argumento del amor imposible, de la mujer abandonada que se casa con el hombre equivocado, y que luego aparece, siempre a destiempo, el amor de su vida, es algo tan viejo, no como el cine, sino como la literatura. Por tanto, estamos ante un guión muy clásico, pero bien trajeado, eficaz, con una buena dosificación dramática y emocional. Lawrence consigue una película correcta, no inolvidable, pero sí redonda y aseada. Es quizá un poco violenta en algunos momentos, pero en general es un film para público amplio. Los actores, sin mostrar demasiada versatilidad, no perjudican a la película, y los aspectos técnicos son ciertamente brillantes.
Este Titanic del mundo del circo, contado en flashback como aquel otro film, hace una defensa del amor verdadero y duradero, del sacrificio por el otro hasta poner en riesgo la propia vida; pero también consiente el adulterio, y está en la cuerda floja en temas como la venganza, la violencia y el fin que justifica los medios. Pero ciertamente hay una bella historia de redención, la de una mujer huérfana que encuentra finalmente la familia que le hará feliz hasta el lecho de su muerte.