El niño con el pijama de rayas, de Mark Herman

Cultura · Juan Orellana
Me gusta 0
25 septiembre 2008
¿Por qué? Por ser la mejor película de este fin de semana, aunque no sea excepcional. Por suponer un inteligente ejercicio de adaptación de una novela nada fácil de traducir al cine. Por acercarse al tema del holocausto a través de la mirada inocente de un niño, fórmula que se demostró exitosa con La vida es bella de Benigni. Por exaltar la amistad por encima del odio. Le lastran ciertos tópicos y un final demasiado enfático.

¿De qué va? Bruno es un niño de nueve años, hijo de un oficial alemán destinado en Auschwitz en la II Guerra Mundial. Sin saber nada de los campos de concentración ni de las maldades del nazismo, se acerca un día a la alambrada donde conoce a otro niño, Shmuel, que "viste un pijama de rayas". Entre ellos surge una hermosa amistad.

¿Para quién? Para los que aún no se han hartado del cine del Holocausto. Para los que han leído la novela de John Boyne y quieren ver una digna adaptación. Para los seguidores de este director, responsable de Tocando el viento y Little Voice.

Noticias relacionadas

Un gladiador capaz de perdonar
Cultura · Isabella García-Ramos Herrera | 0
El 15 de noviembre se estrenó la secuela de la película memorable de Ridley Scott: Gladiator. Esta nueva entrega de la historia ocurre 16 años después de los hechos acontecidos en la primera película. En esta segunda parte, Paul Mescal entra a El Coliseo siguiendo los pasos de Russell Crowe....
28 noviembre 2024 | Me gusta 5