El ´chico de los periódicos´ vuelve con más soul
De esta competición hacia la cima del "soul" sólo hablan aquellos que intentan revestir de novedad todo lo que escriben o comentan. Por su parte, Eli "Paperboy" ni entra ni le interesan las comparaciones; él sigue a lo suyo: Come and get it (EMI) es su nuevo disco junto a su banda, The True Loves.
El joven blanquito "soulman" (estampa del hijo y nieto ideal) lleva pateándose todo tipo de escenarios desde hace años (estuvo hace varios meses en la Joy Eslava de Madrid y estará el próximo verano en varias ciudades españolas), dislocando su apasionada voz en recorridos vocálicos hasta llegar a embestir con sus agudos y compromete todo su ser y su persona para intentar allegar al público la pasión del "soul", melodías más enraizadas en la cultura musical afroestadounidense del "gospel" y R&B que en el universo rítmico de un antiguo vendedor de periódicos (de ahí su sobrenombre "Paperboy").
Con Roll with you, comentado aquí, ya consiguió que se fijasen en él y que la crítica dijera que era el consorte perfecto de la reinas blancas del "soul", Amy Winehouse y Duffy, y el mejor continuador del "soul" clásico de grandes como Sam Cooke, Ottis Redding, Mavis Staples, Aretha Franklin, Patti Labelle, entre otros, de una lista casi interminable de intérpretes negros, en su mayoría.
Eli parecía uno de los elegidos para continuar la estela de aquellos grandes, ya que, pues el "soul" fue derivando al "hip hop soul", el "New Jack Swing" o el "neo soul", con más utilización de elementos electrónicos en sus propuestas.
"Paperboy" y su banda siguen fieles al entramado musical habitual del "soul": arreglos de metales, ensambles sincronizados de instrumentación y coros de féminas, apoyando la interpretación del protagonista: Eli "Paperboy Reed", que parece estar dispuesto a actuar en todo tipo de lugares con una pasión por el trabajo que parece directamente proporcional a la pasión con la que vive este género musical.
Es aquí donde la sombra de Eli es mucho más alargada que la de "la Winehouse" y en la que tal vez su dedicación le dé lo que la naturaleza desplegó gratuita e inconmensurablemente en las cuerdas vocales de Amy.
Veremos.