¡Zapatero, a las cosas!
Esto es precisamente lo que le sucede a España con el cambio de rating: no puede mantenerse donde deseaba. Ésta es una rebaja en la credibilidad del Gobierno en gestionar la crisis en la que estamos inmersos. Es una llamada de atención hacia un poder ejecutivo que es incapaz de mirar de frente la realidad económica y tomar las medidas necesarias para salir de la crisis (creen que serán impopulares, como si la recesión en la que vivimos no lo fuera).
Esta opinión ha ido más allá de nuestras fronteras y lleva a periódicos tan dispares como Die Tageszeitung (http://www.taz.de/1/debatte/kommentar/artikel/1/zapateros-prophezeiungen/) a afirmar que el problema es que Zapatero "vuelve a minimizar una y otra vez la gravedad de la situación, con lo que resulta poco creíble"; o el Financial Times, que "la solvencia de un estado se cimenta en su política. Un gobierno solvente es el que tiene la fuerza para subir adecuadamente los impuestos y mantener el gasto a niveles asequibles".
Los principales problemas que el Gobierno no desea afrontar son, entre otros, la reducción del gasto público, la inflexibilidad del mercado laboral que lleva a perder competitividad de nuestras exportaciones (tan sólo un 25% de nuestro PIB y por debajo de nuestros principales competidores), el saneamiento de las cajas de ahorro con Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB; con un coste aproximado de 34 millardos) y el Fondo de Adquisición de Activos Financieros (con un coste aproximado de 19 millardos), racionalización de la fiscalidad para las Pymes, etc.
La inactividad destructiva del Gobierno (y en algún caso también de la oposición, como con las Cajas de Ahorro) tendrá consecuencias que pagaremos todos tanto en lo social como en lo económico. Las principales son que acabaremos 2010 con el paro superior al 20%, el coste de refinanciación de la deuda pública (en junio vencen aproximadamente 60 millardos de deuda) será sustancialmente mayor y por lo tanto el coste de refinanciación de la deuda privada (180% del PIB) también lo será. El mayor coste de refinanciación, parcialmente derivado del cambio del rating de la deuda pública española, absorberá buena parte de los ingresos fiscales adicionales generados por el aumento del IVA de 5.150 millones de euros, la supresión de la deducción de los 400 euros de otros 5.700 millones de euros y el cambio en la tributación de las rentas del ahorro permitirá ingresar 800 millones de euros adicionales. De lo anterior se deduce que el dinero disponible luego de pagar impuestos para gastar en bienes y servicios será menor y, por lo tanto, también lo será su demanda de mano de obra.
El círculo vicioso descrito anteriormente sólo se podrá cortar por medio de reformas estructurales que el Gobierno se niega, por ahora, a realizar.
Durante uno de sus viajes a Argentina José Ortega y Gasset en 1939 escribió: "¡Argentinos, a las cosas, a las cosas! Déjense de cuestiones previas personales, de suspicacias, de narcisismos. No presumen ustedes del brinco magnífico que dará este país el día que sus hombres se resuelvan de una vez, bravamente, a abrirse el pecho a las cosas, a ocuparse y preocuparse de ellas directamente y sin más, en vez de vivir a la defensiva, de tener trabadas y paralizadas sus potencias espirituales, que son egregias, su curiosidad, su perspicacia, su claridad mental secuestradas por los complejos de lo personal". (José Ortega y Gasset, El hombre a la defensiva, p.211. Meditación del pueblo joven y otros ensayos sobre América, Alianza Editorial, Madrid, 1995).
Ha llegado el momento de hacer caso a este gran español: ¡Españoles, a las cosas!