`La alternativa a Colau es Trias`
¿Qué significa que Ada Colau sea la primera en las encuestas para la alcaldía de Barcelona? ¿Puede ganar? ¿Puede gobernar?
Significa que la ciudad de Barcelona ha llegado a las citas terminales de la confusión, consecuencia de décadas de engreimiento progresista, de cultura transgresora y de desvinculación mimética y alegre. En fin, la Barcelona de Woody Allen despierta en un presente disfuncional, tanto política como institucionalmente. A eso se suma el efecto-espoleta de la crisis económica, de una gestión municipal sin solidez y de muy baja consistencia de las personalidades políticas en escena. Añadamos las veleidades de un ayuntamiento que además de flotar en la autosatisfacción pretende salvar Cataluña. De hecho, el ayuntamiento de Barcelona tiene dinero por el turismo y está actuando como pagador de la Generalitat, en virtud de una “omertá” institucional forzada por el proceso de secesión de Artur Mas. Respecto a Ada Colau, aunque queda poco para el día de la votación, tal vez vaya perdiendo el empuje actual. Ahora mismo podría ganar aunque, ciertamente, suponer que gobierne es un eufemismo. La alternativa sería el voto útil –incluso de algunos votantes del PP– hacia el alcalde actual Xavier Trias, precisamente para parar el avance de Ada Colau. En cualquier caso, todo esbozo de alianzas post-electorales será muy frágil y nocivamente incierto.
¿El fenómeno de Ciudadanos puede refrescar el ambiente político en los municipios catalanes?
Es la pregunta del millón de dólares. Por ahora, el “boom” de Alberto Rivera es un fenómeno político incitante. Si hablamos solo de Barcelona, ya es más que probable que tenga sus escaños en el consistorio, manteniendo o incluso incrementado la fidelidad de voto que ha ido atrayendo. De todos modos, el panorama post-electoral es endiablado. El PSC, ¿pactaría con Podemos y otras fuerzas de esta índole? Aunque haya precedentes, ¿puede el PP entrar ahora en una alianza con una CiU secesionista? ¿Sería factible un acuerdo CiU, PSC, ERC? La política hace extraños compañeros de cama, pero eso no es lo mismo que la política “contra natura”.
Carina Mejías tiene ya una cierta historia como diputada. ¿El voto a esta candidata qué supone?
Antes de diputada por Cs, Carina Mejías había sido concejala del PP. De una parte, eso le da experiencia municipal y por otra no se suma unívocamente al efecto de cambio que quiere Cs. Quizás tenga el voto a favor del cambio, en un orden. Pero eso choca con el efecto físico del voto útil para Xavier Trias, cuya trayectoria le capacita ampliamente para cualquier gravosa componenda si se trata de sobrevivir y también dedicarse al desgobierno costoso, sin credibilidad sostenible.
¿Puede suponer el auge de Podemos un freno a la independencia?
Tan solo en la medida en que unas formas de confusión atajan transitoriamente el empuje de otras. No hace falta ser un declinólogo para darse cuenta de que la ciudad de Barcelona iba deslizándose hacia un panorama de incertidumbre que contrasta perjudicialmente con el valor actual de Barcelona como marca internacional.
¿Va a haber elecciones en setiembre?
Es tan larga la lista de planes y rutas abandonadas en la cuneta que, a hora de hoy, unas elecciones autonómicas para setiembre tal como las anunció Artur Mas son algo más impredecible incluso que el billar a tres bandas. Han perdido energías tanto los movimientos asamblearios como el efecto emocional secesionista, a la vez que era inevitable que CiU y ERC entrasen en fase de divorcio abierto. Además, CiU –según las encuestas– seguiría perdiendo escaños. Más allá, la pregunta es si hacen falta unas nuevas elecciones autonómicas para el bien común y hasta qué punto el partidismo somete a la ciudadanía catalana a una presión moralmente ilegítima.