El éxito está en el corazón
¿Quién a estas alturas no conoce la campaña que durante este verano ha saturado informativos y redes sociales? Sí, si, esa misma que estás pensando : “La campaña del cubo helado, en solidaridad con los enfermos de esclerosis lateral amiotrófica (ELA)´
Quiero dejar muy claro, que apoyo y estoy a favor de cualquier iniciativa que sirva para concienciar a los demás del sufrimiento humano, sea cual sea el motivo que lo cause, por eso la crítica que expreso no va dirigida en contra de la campaña, ni de sus creadores, ni de sus resultados, sino del desarrollo de la misma por parte de algunos, denominados “famosos”
Conozco la enfermedad por una amiga mía que la padeció, habiendo percibido los estragos que a diario su cuerpo experimentaba y el dolor que sus familiares sobrellevaron hasta el día que ELA la venció.
En este país que amo llamado España, tenemos algo particular; existen personas muy hábiles para demostrar que en lugar de hacer algo de verdad, simulan que realmente lo hacen, dando publicidad a sus actos . No veas lo bien que les han venido la redes sociales, donde tan fácilmente se puede colgar ´eso´ que aparentemente hacen . Y aquí , abundan los “famosos de turno” que siempre están en todas las causas solidarias, expresando una y otra vez, que están aplicadísimos en todas ellas. Pero he aquí que la misma asociación de enfermos de ELA en España, nos dice que los fondos recaudados en la península, han sido pocos en comparación con los de EEUU. No olvidemos que : ´Spain is diferent´
Pues estoy cansado de tanto famosito con bellos mensajes y su dramatismo presentándonos el dolor ajeno. Se quedan en el primer impulso de la causa que puede haberles removido el corazón con una sacudida de 0,1 en la escala Richter, pero que cuando hay que ponerse manos a la obra en la acción (en este caso no la de tirarse el cubo de agua helada, sino en la aportaciónn económica a la causa) todo se ralentiza hasta el olvido.
He visto mucho exhibicionismo de cuerpos, mucha broma, mucha risa, pero poca información seria ofrecida por personajes que poseen un gran poder influyente con su imagen; porque no nos engañemos, un gran número de ellos (asesorados por sus managers) lo que les preocupa antes de hacer algo así, es si eso va a ser bueno para su proyección profesional. Sé de buena tinta, que se desviven por salir donde sea y estar en el candelero de la fama con lo que sea.
A mí las cuentas no me salen. Voy a fijarme en uno de esos famosos. El elegido, para la muestra gana solo por su trabajo (sin contar los demás derechos de imagen y publicidad) unos 16 millones de euros al año, o sea que por semana 48.315 euros, 6.902 por día, 288 por hora. Creo que le da para llegar a fin de mes ¿no?…
La asociación de ELA en España dice que ha recaudado 120.000 euros. Insiste en que la mayoría de las donaciones han sido de gente anónima y en pequeñas cantidades. Acabo de mostrar el sueldo desglosado que la revista Forbes hizo de uno de los famosos, que ha participado en la campaña. Con tanta celebridad que he visto en youtube e instagram tirándose el agua y con los datos ofrecidos por la asociación española de ELA, es fácil sacar conclusiones sobre la implicación de algunos en la empresa. Que cada uno extraiga las suyas.
Campañas para tomar conciencia del dolor ajeno y ayudar a paliarlo, un sí rotundo de mi parte. Pero a algunos les diría : ´Menos cubos de agua y más donaciones´.
Es muy fácil saber si la campaña informativa ha sido un éxito, basta preguntarse ´¿ Sé lo que es el ELA y sus efectos?´. Haced la prueba, consultadlo a vuestros conocidos. Seguro que han seguido el ´Ice Bucket Challenge´.
Aprovecho el post para considerar una gran paradoja que vi reflejada en una viñeta de humor, ante tanta agua vertida y la escasez de ella en varias partes del mundo. Algunos se han rasgado las vestiduras escandalizándose por ello, utilizando esta actitud también de forma hipócrita, para justificar su desaprobación y su no implicación en la causa. Otro tipo de sufrimiento ajeno que bien merece su campaña.Y muchas dolencias ,penas y padecimientos que reclaman una atención y ayuda para quienes no los conocen. Enfermedades raras, que por no ser productivas para las farmacéuticas , dejan en la cuneta del olvido y el abandono al enfermo y los que lo rodean. Ellos no tendrán su publicidad para poder recibir ayuda y conseguir el medicamento de consuelo o salvación.
El éxito no está en las campañas,ni en las donaciones, sino en los corazones. Mientras éstos sigan siendo de piedra, cualquier marketing servirá para tranquilizar conciencias. No nos preocupemos demasiado, hay muchos famosos dispuestos a participar de forma altruista, que nos ayudarán a concienciarnos de ello.