Un Madrid más compacto

Por fin Ancelotti recibió buenas noticias desde el césped tras la victoria por 5 a 1 frente a una Real mermada fisicamente tras el excelso trabajo en Champions la semana pasada. Se consolida el tridente Cristiano, Bale, Benzema dejando a Di María para animar al personal en momentos de hastío. Xabi Alonso mandará en el centro del campo todo el tiempo que el cuerpo aguante. Modric fue enlace entre la defensa y el ataque recibiendo de cara y creando espacios. Incluso Khedira pisó área contraria con paso firme. Una conclusión está clara: para el Bernabéu hay equipo y juego.
El Madrid trata de engancharse a la liga sumando su tercera victoria consecutiva y la quinta en las últimas seis jornadas de liga. Cristiano vuelve a ser el mejor, hizo triplete. y van muchas fastuosas actuaciones como muestra de estar ante otro de sus grandes momentos. Como ya hiciera frente al Athletic de Bilbao, el Madrid mostró en 45 minutos un fútbol alegre, que seduce al aficionado.
La vuelta de Xabi Alonso es sinónimo de orden y criterio. Además, aporta esos pases que dulcifican el fútbol. Unidad entre las tres líneas y bandas abiertas. Contragolpe característico, muy bello por cierto, y en frente una defensa que más bien fue espectadora. La Real no lo puso complicado, tan solo se inspiró en la desconexión de los de Ancelotti.
Benzema marcó y asistió, muestra de su lenta recuperación anímica. No es ese tipo de futbolistas que al aficionado enamore pero la calidad y la capacidad de visión cuando toca la pelota es indiscutible.
La cuenta pendiente, además de reafirmar en posteriores ocasiones la solidez defensiva, se encuentra en la persona de Isco: él necesita al Madrid y el Madrid necesita de él.
El Madrid comienza a dar una imagen concreta y apetecible. Tarea tiene el míster italiano para preparar los encuentros que juegue como visitante donde se ganan las ligas. Allá donde va el Madrid sufre. Solo estando cierto de la identidad futbolística que quiere practicar puede sobreponerse a las dificultades venideras.