Los estudiantes
Éste ya no es el Gobierno de una revolución sino un gobierno más, tan parecido a tantos que hemos tenido, cuya respuesta frente a los estudiantes en la calle es la misma de ayer: la peinilla, la "ballena", las lacrimógenas, la brutalidad sádica. En su desesperación, consciente del efecto de la poderosa imagen de miles y miles de muchachas y muchachos desafiantes en todo el país, Chacumbele intenta el viejo truco, ya mellado. "Hijos de papá", "niños bien", "cachorros de la oligarquía", son los denuestos que expulsa por la boca, en una tentativa patética de descalificar a este oponente que le pisa su propio terreno. Pero no hay modo de arrendarle la ganancia. Los estudiantes siempre han sido los consentidos del país. No hubo dictadura que no los tuviera de frente y nunca dejó el pueblo llano de sentirse interpretado por ellos.
Las amenazas del domingo tuvo que tragárselas. Creyó que iba a intimidar a los estudiantes y la respuesta fue un altivo "¿Quién dijo miedo?". Hay un nuevo actor político en el escenario. Estuvo ausente más de dos décadas, pero reapareció, con el tanque full, vanguardia de un país que hoy, hasta dentro de las filas del pueblo que vota por Chávez, se pregunta al fondo de qué abismo pretende lanzarnos el presidente. El NO se agiganta. La disposición a derrotar el propósito continuista y totalitario, voto en mano, está recibiendo un impulso formidable. El ariete sale de las aulas.
La marcha fue majestuosa. Ordenada, con los propios estudiantes impidiendo cualquier acción de provocadores o exaltados. Cumplieron con el objetivo ante el TSJ. La respuesta de los grupos ñangaro-fascistas del régimen fue el asalto a la universidad, con su saldo de heridos de bala. Es la desesperación, que comienza a hacer presa de los "reformadores" de la Constitución. Están cayendo las caretas, en efecto; las caretas de quienes no tienen otra razón que la de la fuerza bruta. Quieren el pretexto para intervenir la universidad. Provocan la violencia para llamar a la violencia oficial. ¡Qué contraste el de la marcha con el ataque alevoso, cobarde y armado contra los estudiantes y la universidad! Es el eco del discurso de Chávez, el domingo pasado.
(publicado en el diario venezolano Tal cual)