Despedida al Papa
Son demasiados los pensamientos de respeto, admiración y gratitud hacia Usted. Lo único que le digo es que confiamos en su docilidad al Espíritu Santo y a su obediencia por lo que ahora lo estaremos acompañando en este nuevo llamado que el Señor le ha hecho de "orar por todos". Gracias por su sí incondicional que nos enseña a hacer la Voluntad de Dios a pesar de que no sea comprendida. Gracias por todo su sacrificio.
Gracias por "arrancar gracias del cielo" para toda la humanidad, en especial para nuestra amada Iglesia, a través de sus oraciones.
Le pido a la Madre de Dios y Madre nuestra que lo bendiga, proteja y le llene con su amor.
Santo Padre, cuente con nuestras oraciones y amor fraternal en el corazón de Jesús.
Que la gracia de nuestro Señor Jesucristo esté siempre con usted,