50 euros menos
La del próximo miércoles va a ser su primera huelga general porque en 2002 todavía estaba estudiando. Hasta hace unos días le daba igual, estaba convencida de que no iba a cambiar nada su situación. Hasta hace unos días no tenía nada en contra de los sindicatos. Más bien no existían para ella. Nunca se ha encontrado con los representantes sindicales en las tres empresas en las que ha trabajado hasta ahora. Pero desde ayer se ha dado cuenta de que la huelga tiene mucho que ver con su destino. La cuestión es sencilla: si no va a trabajar le van a descontar casi 50 euros del sueldo. Y eso en los meses buenos significa dejar de ir al cine y a tomar cañas, y en los meses malos ir muy pillada para los gastos extra que le surjan.
La huelga le plantea un serio problema. Sólo puede llegar al trabajo en tren de cercanías y sólo va a haber uno cada media hora cuando ella lo necesita. No puede salir temprano de casa porque tiene que dejar a su hija en la guardería. Ya sabe lo que es una huelga general.